El 27 de abril es el Día Mundial de la danta, un día dedicado globalmente a celebrar a los tapires y a crear conciencia sobre esta especie en peligro de extinción, las amenazas a las que se enfrentan y cómo podemos ayudar.
El tapir centroamericano es el mamífero terrestre más grande del Neotrópico y también una de las especies más importantes desde el punto de vista ecológico. Conocidos como «jardineros del bosque» porque dispersan importantes semillas, los tapires son vitales para los ecosistemas forestales y por lo tanto son críticos para revertir el cambio climático global. Los tapires están en gran parte amenazados por la pérdida de hábitat, la caza furtiva, las colisiones en las carreteras y los conflictos con los agricultores. En la actualidad quedan menos de 4.500 adultos en estado silvestre y las poblaciones existentes están disminuyendo a nivel mundial.
La Fundación Vida Silvestre de Costa Rica (CRWF), a través de su proyecto característico Nai Conservation [ http://naiconservation.org], está liderando la conservación del tapir en Costa Rica utilizando investigación de punta, extensión educativa, y asociándose con las comunidades locales, empresas y el gobierno para encontrar soluciones duraderas para la coexistencia humano-tapir.
Y estos esfuerzos están dando frutos. Desde 2005, las colisiones en las carreteras de los tapires han disminuido en un 90%, se ha evitado el conflicto en más de 5.000 hectáreas gracias a las asociaciones de ecoturismo responsable con los agricultores, 400 escolares han participado en los programas educativos Salva-Dantas y los investigadores y las brigadas comunitarias han desplegado 153 cámaras trampa para vigilar y estudiar a los tapires silvestres.
Comenzando el Día del Tapir en 2020, el CRWF está lanzando una campaña de un mes de duración para recaudar 5.000 dólares para este importante trabajo. Con la pandemia en curso, esto llega en un momento difícil para el mundo. But conservation must continue, and CRWF is committed to leading the way for tapirs.